Uno de los paseos en bicicleta por excelencia es el que, en Lanzarote, bordea el mar entre Arrecife, la capital insular, y Puerto del Carmen. Un trayecto fácil para los profesionales, aunque no corto (alrededor de 33 kilómetros), en el que el atractivo reside, sobre todo, en ir pedaleando mientras el salitre nos golpea el rostro, ya que cruzaremos varias localidades del litoral.